El borde habitable entre dentro y fuera.
El engawa es una estrecha galería de madera que recorre el perímetro de las casas tradicionales japonesas, actuando como transición entre el interior protegido y el exterior natural.
No es del todo pasillo ni del todo terraza. Es un espacio intermedio, sin función definida, pero lleno de significado.
Se habita en silencio, se recorre con pausa, se abre al jardín o se cierra con shōji según el momento del día o del alma.
El engawa no separa: conecta.
Es el lugar donde se posa la luz, donde el viento entra sin imponerse, donde uno puede simplemente estar.
Una arquitectura que valora el umbral como lugar de vida.


